Las posiciones vacantes dentro de una empresa pueden tener un efecto más adverso sobre la productividad y la moral del equipo de lo que inicialmente se pensaba. En un nivel muy básico, un largo proceso de contratación puede significar perder candidatos preferidos, lo que en el contexto de la escasez de habilidades actuales y la batalla por el talento puede ser una pérdida decepcionante y dañina en términos comerciales.

Consecuencias y costos ocultos

Pero el impacto de un proceso de contratación largo o ineficaz puede tener consecuencias de mayor alcance y costos ocultos no sólo para una empresa, sino para la comunidad empresarial en general.

Estos macroefectos resultantes podrían seguir teniendo un impacto residual en las empresas, impidiendo que la economía, y en última instancia, la agenda de crecimiento de una empresa, logren su máximo potencial.

Por ejemplo, las pymes son el motor del crecimiento de la mayoría de las economías del mundo, pero a menudo no cuentan con el poder de atracción de reclutamiento de marcas de alto perfil como Google, Amazon o Facebook.

A menudo luchan por atraer el talento más demandado, y los procesos lentos de contratación agravan aún más el problema. Muchos que inicialmente pueden atraer a un candidato de alto calibre descubren que no pueden asegurar su mejor opción.

Según los gerentes a nivel mundial, el 38% atribuye los roles no cumplidos durante más de un mes como resultado directo de haber perdido candidatos durante el proceso de contratación. Los candidatos más solicitados no están buscando activamente el traslado si están actualmente empleados, pero si se les presenta una oportunidad emocionante pudieran verse tentados a hacer el cambio.

Un largo proceso de contratación puede hacer que muchos candidatos pierdan interés y decidan quedarse o aceptar otra oferta competitiva.

Impacto en la marca del empleador

Esto puede tener un impacto más amplio en la reputación, particularmente en la marca del empleador. Los procesos de reclutamiento son cada vez más transparentes a través de las redes sociales y en sitios de revisión como Glassdoor, por lo que los candidatos que experimenten procesos de contratación negativos pueden optar por calificar o compartir sus experiencias con sus redes en línea.

Como el candidato de hoy puede ser un posible cliente en la actualidad o en el futuro, ¡esto también puede presentar costos residuales adicionales para el negocio!

De acuerdo con el Harvard Business Review, una mala reputación de la empresa en realidad puede costarle al menos un 10% más por contratación. Ese fue el diferencial promedio requerido para convencer a un candidato de unirse a una organización que creían que tenía una mala reputación.

Una experiencia mala del candidato también puede tener un impacto directo en los ingresos. Según nos cuenta el experto en análisis de personas, David Green: Virgin Media en el Reino Unido se dio cuenta de que las experiencias negativas dentro del proceso de reclutamiento dieron como resultado la renuncia de los candidatos como clientes y la pérdida de 7,7 millones de euros en ingresos. Conseguir y mejorar la experiencia del candidato tuvo un beneficio financiero tangible directo e inmediato para el negocio.

La pérdida de productividad genera una repercusión adicional para las empresas. Deloitte ha calculado el costo total de la rotación de personal voluntaria, incluidos los costos directos para reemplazar a un empleado, la reducción provisional de los costos laborales mientras queda vacante un puesto, y (tal vez de forma más convincente) los costos totales de productividad perdidos durante este período.

Rotación voluntaria está costando millones

El informe concluyó que la rotación voluntaria le está costando a las organizaciones millones de dólares, y que los posibles ahorros en la remuneración de un puesto vacante asciende a una fracción - 14% en su ejemplo dado - de los posibles ingresos y productividad que una persona en el puesto puede proporcionar.

Retrasar una decisión de contratación complica los desafíos a los que se enfrentan las empresas que buscan retener a sus mejores empleados, y puede ser un esfuerzo sumamente costoso.

El efecto sobre los empleados y la administración existentes también debe considerarse un posible "costo" para la empresa. Los puestos no llenados afectan la moral de los empleados, quienes sólo pueden soportar grandes cargas de trabajo durante un período determinado antes de que empiece a afectar su compromiso y la felicidad en el lugar de trabajo.

Puesto que la mayoría de los gerentes a nivel mundial informan que la rotación del personal ha aumentado en los últimos tres años y más de la mitad predice que empeorará durante los próximos 12 meses, retrasar constantemente una contratación puede afectar aún más los niveles de retención si los empleados no pueden salir adelante.

Contratar rápido x encontrar el candidato correcto

Si bien existe una presión comprensible sobre las organizaciones por conciliar las vacantes sin cubrir, la prisa por contratar siempre debe equilibrarse con la necesidad de asegurar al candidato adecuado. Los procesos de selección inadecuados no solo crean problemas para el resto del equipo, sino que también pueden generar costos de contratación cada vez mayores a medida que más personas deciden irse.

Por ejemplo, el Harvard Business Review declaró recientemente que "el 80% de la rotación de empleados se debe a malas decisiones de contratación". Mientras tanto, la Society for Human Resources Management estima que puede costarle a las organizaciones hasta cinco veces el salario anual de un mal empleado en tiempo perdido, así afectar a clientes y colegas.

Aquí es donde debe alcanzarse un equilibrio cuidadoso. La contratación del candidato adecuado dará sus frutos a largo plazo, ya que los empleados son el motor de una empresa en crecimiento.

Pero encontrar una forma de garantizar una búsqueda de calidad y exhaustiva mientras se impulsa la eficiencia necesaria para seguir siendo competitivo y productivo será un diferenciador clave en la batalla por el talento de hoy. Las empresas que puedan hacerlo serán victoriosas, con lo que se posicionarán para el crecimiento y la oportunidad potenciales que vendrán en consecuencia.