El famoso "happy hour" es una costumbre entre compañeros en las oficinas del mundo entero. Además de relajarse después de un día intenso, ayuda a conocer mejor a los pares y estrechar lazos con el equipo. Aun así, pese a su carácter relajado, el momento exige un comportamiento adecuado. Vea algunas indicaciones de Robert Half para sacar lo mejor de la más divertida de las reuniones - la que se produce en la mesa de un bar.
Aprecie con moderación
La regla número 1 es no exagerar. Tenga en mente que el happy hour es una extensión del ambiente laboral, pese a su informalidad. Por lo tanto, no exagere con el trago ni las bromas. Aunque uno no quiera, sigue bajo la observación de superiores y compañeros. Si vas a "meter la pata" que sea con la familia o los amigos.
Rompa el hielo
Este encuentro puede ser una buena manera para descubrir afinidades entre sus compañeros o para acercarse a personas con quien aún no tuviste la oportunidad de conversar más. ¡Es una buena oportunidad de networking! La tendencia es que incluso la productividad en el trabajo mejore.
No caiga en los chismes
Ya sabes que es necesario cuidar la imagen. Puede parecer tentador hablar mal de alguien en un ambiente más relajado. Cuidado. Esa información puede llegar rápidamente a esa persona o incluso a su jefe, al que probablemente no le gustará nada eso. Mantenga la línea, hay temas mucho más interesantes que considerar.
Participar o no, ese es el dilema
Nadie debe sentirse obligado a ir a un bar con los amigos del trabajo o incluso con el jefe. Usted sí puede rechazar la invitación y explicar sus razones, si lo considera necesario. A final de cuentas, el happy hour es informal por sobre todas las cosas. Puedes aprovechar otros momentos de relajo en el ambiente laboral para acercarse a sus compañeros.
Disfrute el momento
Al final este es el propósito de este evento, ¿cierto? Su principal objetivo debe ser, ante todo, la diversión. Así los beneficios serán capturados naturalmente. ¡Sea feliz! ¡Salud!