Incluso el líder con las mejores intenciones no está libre de cometer algún traspié. Es totalmente comprensible, ya que el error es inherente al ser humano. Sin embargo, quien está al frente de un equipo tiene el deber de saber manejarlo y evolucionar siempre en sus actitudes. Hicimos una lista con las cinco faltas que más cometen los jefes, y cómo solucionarlas.

1. Asignar la misma tarea a más de un colaborador

Generalmente, ocurre porque el ejecutivo olvida que ya le pidió a alguien que la realice y termina solicitando lo mismo a una segunda persona. Eso genera incomodidad, porque, además del tiempo y energía que se desperdician, aquél que recibió la tarea primero cree que no es valorado en sus funciones. Anota lo que solicitas a cada persona del equipo. Si cometiste un error así, ofrece las excusas del caso y trata de no incurrir de nuevo en ese descuido.
 

2. Criticar a un empleado en presencia de otro

No tiene sentido y es una de las cosas más indeseables en las que un jefe puede caer.  Además de causar incomodidad en una de las partes – sobre todo si no tiene relación con la situación- puede producir rumores, algo nada saludable en un ambiente corporativo. Si algún subordinado presenta problemas, habla con él en persona y a puertas cerradas.

3. Ignorar las contribuciones importantes del equipo, pero criticar pequeños errores que no impactan sobre los resultados

Si un empleado trabaja tres días seguidos hasta muy tarde para terminar un proyecto, y después comete un error involuntario en una presentación, no debería ser reprendido por eso. Tu rol es orientar y monitorear al equipo, quizás lo estás demandando demasiado, y en ese caso, el error no es de ellos, sino tuyo.

4. Demostrar apoyo al equipo en teoría, pero no defenderlo ante los directivos en la práctica

Un buen líder debe estar bien alineado con sus subordinados, listo para negociar sus necesidades y protegerlos. Claro está que no será posible hacer valer tu voz siempre, pero debes dejar en claro que estás luchando por ellos. No sirve decir, por ejemplo: "Yo no tomo decisiones, apenas la ejecuto". ¡Encuentra tu voz y úsala!

5. Hay jefes que no agradecen al equipo ni reconocen un trabajo bien hecho.

Decir "gracias" o elogiar a tus colaboradores no quiere decir que eres bueno o demasiado condescendiente. Por el contrario, los trabajadores se sienten motivados y el equipo se une más. ¿Qué tal agradecer ahora?