La idea de caminar y hablar cuando se trata de tomar decisiones importantes no es nueva. Filósofos griegos como Sócrates y Aristóteles fueron conocidos por deliberar y predicar sobre el universo mientras andaban alrededor de las columnas del Liceo. De hecho, los pupilos del primero, los sofistas, eran conocidos como los “errantes”.
En la actualidad, algunos de los innovadores más brillantes de Silicon Valley como el creador de Facebook, Mark Zuckerberg, continúan usando esta antigua técnica para convertir la monotonía diaria de las reuniones eternas alrededor de una mesa en una conversación inspiracional y revitalizante.
¿Qué sucede cuándo tus colegas de trabajo mantienen un “walking meeting” en lugar de tener una reunión tradicional? Para entender este nuevo concepto, analizaremos los beneficios de dejar atrás el sistema antiguo de reuniones y dar la bienvenida al concepto de “conversar y caminar”.
Seleccionar miembros de primer nivel
Al agendar una reunión en una sala de conferencias tradicional, es tentador invitar a todas las personas que puedan estar implicadas en un tema. Por el contrario, al planear un “walking meeting” hay que ser más selectivo con aquellos a los que se invita y estar seguros de que solo los individuos más relevantes están incluidos. Muchas veces, contar con un grupo pequeño puede ser más rápido y productivo.
Impulsando la creatividad
Caminar es también una excelente manera natural de prender las neuronas, despejar la mente e incentivar el pensamiento creativo. Un reciente estudio de la Universidad de Stanford examinó los niveles de creatividad que se encontraban en las personas sentadas y paradas y descubrieron que esta aumenta en un 60% si se está en movimiento. En una reunión en la que se necesita pensar “out of the box”, un paseo podría ayudar a que saliese una gran idea.
Ejercicio sin esfuerzo
Al sumar un “walking meeting” a tu día, te estás dando la oportunidad de escapar de la pantalla del computador y darle un descanso a tus ojos. Además, según el “Better Health Channel”, tan solo 30 minutos de caminata al día pueden ser suficientes para reducir el desarrollo de condiciones debilitantes. Un equipo sano generalmente significa mayor productividad.
Enfrentando discusiones difíciles
Durante un “walking meeting” es necesario mirar hacia adelante y poner atención al entorno, así como al tema en cuestión, lo que puede ser muy beneficioso si se trata de una materia difícil. Es más fácil discutir temas sensibles cuando se está caminando junto a la persona que sentados frente a frente. Hay que considerar tratar tópicos conflictivos con este método.
Haciendo un equipo de trabajo más feliz
Lo mejor de todo, al salir a tomar el aire y distraerte, estás mejorando tu bienestar también. Una buena caminata puede ser un impulsor de ánimo, y no hay nada mejor que un lugar de trabajo feliz y positivo para incrementar la productividad.
¿Listo para hablar y caminar? Asegúrate de transmitir esto a tus colegas antes de invitarlos a este tipo de reuniones y diles que dejen sus teléfonos y tablets en el escritorio, para que puedan disfrutar de los beneficios de esta expedición.